Nuevas incorporaciones a la nómina de novelas criminales.
Las editoriales han reclutado a lo más granado de lo criminal para que estos ratos de vacaciones -para quién disfrute de ellas- sintamos correr la sangre.
RBA publicó una hace unas semanas la última novela del recientemente fallecido Philip Kerr: Azul de Prusia, en traducción de Eduardo Iriarte Goñi, la duodécima entrega del detective Bernie Gunther. Doble acción, en el 56 en la Riviera francesa y en el 36, investigando un asesinato en el domicilio de un tal Adolf Hitler.
No hay que olvidar que RBA está reeditando las obras de Jim Thompson, este es un momento ideal para repasar la obra del soberbio autor de Oklahoma.
Salamandra ataca con uno de sus autores habituales: Antonio Manzini: 7-7-2007, traducido al catalán por Anna Casassas Figueras y al castellano por Julia Osuna Aguilar. En esta nueva entrega se desvelará al fin el oscuro pasado romano del subjefe Rocco Schiavone.
Junto a él aparece otra autora de su catálogo: Ruth Ware: Juego de mentiras. Traducido por Gemma Rovira Ortega. Aquí la autora inglesa investiga la resistencia de la amistad femenina ante el crimen a partir de las relaciones del que fue un cuarteto de amigas acérrimas en la juventud. Suspense y ritmo, seguro. En catalán lo ha editado Bromera en la traducción de Lluís-Anton Baulenas.
Y junto a estos dos autores conocidos un nuevo fichaje: David B. John: Infiltrada. Javier Guerrero Gimeno ha traducido esta muy recomendable novela de espionaje ambientada en Corea del Norte y los USA. Una muy conseguida historia con varias subtramas escrita con oficio y que despeja algunas incógnitas del hermético régimen oriental. En breve en Paraffin Test. Salamandra se está consolidando como la editorial de referencia del thriller contemporáneo de espías. Bravo.
En breve la gente de Sajalín pondrá en las librerías la traducción que Juan Carlos Postigo ha hecho de la única novela que consiguió ver publicada el ladrón y politoxicómano James Fogle: Drugstore Cowboy. Se trata de la historia de un atracador de farmacias y su banda, una especie de memorias del propio autor que Gus Van Sant llevó al cine. También le haremos pasar la prueba de la parafina.
Alianza hace una formidable propuesta: la nueva obra de Uwe Timm: Icaria. La historia de un oficial norteamericano enviado a Berlín en 1945 para investigar a unos científicos del derrotado régimen nazi. Una magnífica excusa para construir esta espléndida novela sobre la reconstrucción desde las ruinas y sobre la maldad. Traducida por Paula Aguiriano Aizpurua.
Siruela no falta a la cita, además de colocar a la enorme Fred Vargas en todas las librerías merced al Princesa de Asturias de las Letras (todas las novelas en nuevo formato en septiembre), dispone dos novedades en su colección de novela negra. Por un lado, Los falsificadores, una intriga sobre el turbulento mundo de las falsificaciones literarias, escrita por Bradford Morrow y traducida por Julia Osuna Aguilar. En el otro lado, Susie Steiner: La desaparición de Edith Hind (estos son tiempos de desaparecidas). Traducción de Miguel Ros González de esta novela sobre la importancia de las primeras 72 horas tras la desaparición de una víctima. Es la primera entrega de las investigaciones de la oficial inglesa Manon Bradshaw
Y también Siruela, en su colección de novela policíaca clásica, trae la segunda entrega de las celebradas ocurrencias de Philip Trent, que triunfó con el último caso de Philip Trent y que ahora regresa con Philip Trent y el caso Trent. Traducción de Guillermo López Gallego de la obra de E. C. Bentley.
Y otro clásico, Margery Allingham: Más trabajo para el enterrador. Traducción de Antonio Padilla de una nueva singladura del elegante y resuelto Albert Campion en medio de apariciones, envenenamientos y unos cuantos cadáveres, de la mano de la fresca e interesante autora de mediados del siglo XX. Edita Impedimenta.
La máquina de Alrevès tampoco para: Pere Cervantes: Golpes, la crónica de un policía que acaba de dejar al prisión provisional y no está dispuesto a perder el tiempo y todo lo que ha aprendido, quiere cambiar de vida dando un golpe a unos traficantes de drogas.
No me olvido, claro, de la descarga de Jöel Dicker. La Campana en catalán (traducido por Imma Falcó) y Alfaguara en castellano (María Teresa Gallego Urrutia) han apostado este verano por el nuevo thriller lleno de misterio sobre la investigación que veinte años atrás se hizo, al parecer de mala manera, del asesinato de toda una familia.
La desaparición de Stephanie Mailer. La desaparició de Stephanie Mailer.
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